Atlanta, EE.UU. En su primera aparición defensiva como inicialista en Grandes Ligas, el dominicano Rafael Devers respondió con firmeza al bate y en la defensa, impulsando a los Gigantes de San Francisco a una victoria contundente de 9-0 sobre los Bravos de Atlanta en el Truist Park, la noche del martes.
Devers, alineado por primera vez en la primera base tras nueve temporadas en la antesala, se fue de 5-2, incluyendo un doble y un sencillo remolcador. Aunque no realizó outs de forma directa, cumplió eficazmente al recibir con seguridad varios tiros clave de sus compañeros del cuadro interior.
Este desempeño marcó un cambio importante para el exjugador de los Medias Rojas, quien había expresado anteriormente su oposición a abandonar la tercera base. Sin embargo, la firma de Alex Bregman por Boston en el receso invernal dejó clara la intención del equipo de desplazar a Devers defensivamente, lo que eventualmente desembocó en su cambio a los Gigantes el pasado 15 de junio.
Desde su llegada a San Francisco, Devers había sido utilizado únicamente como bateador designado, mientras lidia con molestias en la espalda baja y la ingle. Pero el dirigente Bob Melvin decidió colocarlo en la inicial, convencido de que su recuperación avanza. “Va a tener que aprender sobre la marcha… pero él quiere estar en el terreno”, declaró el estratega.
La ofensiva de los Gigantes explotó con dos ataques de cuatro carreras, en la segunda y séptima entrada. El venezolano Wilmer Flores amplió la ventaja con un jonrón de tres carreras. Fue la primera vez desde el 22 de junio que San Francisco anotó al menos nueve carreras en un partido.
Aunque Melvin señaló que Devers no será el primera base todos los días, admitió que el equipo lo visualiza como una opción futura estable en la posición.
Con esta victoria, los Gigantes rompieron una racha de seis derrotas consecutivas, la peor de su campaña.
