Santo Domingo, R.D.– José Eduardo Ciprián Lebrón, alias Chuki, quien fue ultimado el pasado fin de semana en el sector Herrera, Santo Domingo Oeste, había sido beneficiado con libertad condicional en octubre de 2024, pese a la oposición del Ministerio Público.
Ciprián cumplía una condena de 10 años de prisión tras ser señalado como uno de los autores intelectuales del atentado contra el expelotero de Grandes Ligas David Ortiz (Big Papi), ocurrido en junio de 2019 en un bar de Santo Domingo Este. El exjugador resultó herido de bala, hecho que conmocionó al país y la comunidad internacional.
De acuerdo con documentos judiciales, Chuki había cumplido cinco años de la condena cuando sus abogados, Dorian Carlos Philips Pérez y Eladio Paula Sánchez, solicitaron la libertad condicional ante el Tribunal de Ejecución de la Pena del Departamento Judicial de San Cristóbal, con sede en Peravia. La petición fue acogida por el juez José Manuel Arias, titular del tribunal, y ejecutada días después por la Dirección de Prisiones.
El Ministerio Público se había opuesto de manera tajante, alegando que no estaban dadas las condiciones para otorgar el beneficio y recordando que Ciprián había estado vinculado a hechos delictivos aún mientras guardaba prisión.
“Si desde la cárcel usted tuvo la facultad de cometer un hecho, ¿qué no será estando en libertad?”, argumentó la fiscalía en ese momento.
A la audiencia donde se conoció la solicitud no asistieron las víctimas del caso: David Américo Ortiz Arias (David Ortiz), Sixto David Fernández Vásquez y Jhoel López Durán, a pesar de estar citados.
El pasado fin de semana, Ciprián fue ultimado a bordo de una yipeta en Herrera, cerrando un capítulo marcado por controversias judiciales y cuestionamientos sobre el sistema de justicia penal.
