El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este viernes un decreto que crea una nueva categoría legal: “Estado patrocinador de detenciones ilegales”, una medida que busca castigar a países que encarcelan de forma arbitraria a ciudadanos estadounidenses, y pretende disuadir futuras detenciones injustas.
Según explicó un alto funcionario del Gobierno, la designación podría implicar sanciones económicas y restricciones migratorias para los ciudadanos de los países señalados. Además, la responsabilidad de identificar a estos países recaerá en el Departamento de Estado.
“Incluye opciones de sanciones y también la inadmisibilidad de ciudadanos de esos países”, explicó el funcionario.
Prohibiciones de viaje para estadounidenses
El decreto también contempla la posibilidad de restringir los viajes de ciudadanos estadounidenses a países con historial de detenciones ilegales. Entre los países mencionados con antecedentes en este tipo de prácticas están Venezuela, Rusia, Irán, China y Afganistán.
Actualmente, Estados Unidos ya prohíbe viajar a Corea del Norte con pasaporte estadounidense, salvo excepciones muy limitadas. En estos casos, se otorgan “pasaportes de validación especial”.
Afecta tanto a gobiernos como a entidades no reconocidas
La nueva designación no se limita a gobiernos oficialmente reconocidos, sino que también podrá aplicarse a entidades que controlan territorios significativos, como ocurre con los talibanes en Afganistán. Estados Unidos no reconoce a los talibanes como gobierno legítimo, pero al menos un estadounidense, Mahmood Habibi, sigue detenido bajo su control.
“Es una ampliación del espectro contra quienes podemos usar estas herramientas”, afirmó el funcionario.
“No tienes que estar financiando a Hamas o al-Qaeda; basta con que detengas injustamente a nuestros ciudadanos”.
Continuidad de políticas contra detenciones arbitrarias
El decreto firmado por Trump amplía acciones previamente tomadas por administraciones anteriores. En 2022, el entonces presidente Joe Biden firmó una orden ejecutiva que declaraba como emergencia nacional la detención arbitraria de estadounidenses. Además, implementó el indicador “D” en las alertas de viaje del Departamento de Estado, para advertir sobre el riesgo de ser detenido o tomado como rehén en ciertos países.
Con información de CNN.