El Gobierno de República Dominicana ha declarado como "alta prioridad" la intervención y recuperación de los ríos en el área metropolitana del Gran Santo Domingo.
Mediante el decreto 531-25, firmado por el presidente Luis Abinader, se establecen los límites geográficos para esta iniciativa y se asigna a la Unidad Ejecutora para la Readecuación de Barrios y Entornos (URBE) la tarea de mejorar y desarrollar infraestructuras en las riberas.
URBE deberá garantizar que las intervenciones respeten las condiciones sociales, culturales y patrimoniales, además de realizar procesos de socialización con las comunidades afectadas para asegurar su participación y proteger sus derechos. También se encargará de gestionar la reubicación de los residentes impactados.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales será responsable de la supervisión técnica y ambiental del proyecto, asegurando el cumplimiento de estándares nacionales e internacionales de protección ambiental.
Esta institución también implementará medidas para conservar la biodiversidad y los ecosistemas acuáticos, forestales y ribereños afectados por el proyecto.
