Nueva York.– El comité conjunto de competición de las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) aprobó la implementación del Sistema Automatizado de Bolas y Strikes (ABS), una herramienta tecnológica que permitirá a los jugadores apelar las decisiones de los árbitros sobre lanzamientos en la zona de strike.
El mecanismo, basado en la tecnología Hawk-Eye —ya utilizada en deportes como el tenis—, había sido probado extensamente en ligas menores y más recientemente en partidos de pretemporada de 2025. Ahora, entrará en vigor en la temporada 2026, marcando un cambio histórico en el béisbol profesional.
De acuerdo con la normativa, cada equipo contará con dos oportunidades de impugnación por juego, con la posibilidad de sumar adicionales en entradas extra. Las apelaciones solo podrán ser solicitadas por el lanzador, el receptor o el bateador, sin intervención de entrenadores ni jugadores del banquillo.
Las revisiones aparecerán en tiempo real en los marcadores de video de los estadios, mostrando de manera gráfica la trayectoria del lanzamiento. Según cálculos de la MLB, basados en los ensayos de la primavera estadounidense, cada revisión tarda en promedio 13,8 segundos en resolverse. Si la apelación resulta favorable, el equipo conservará su derecho a seguir utilizando el recurso.
Con esta medida, la liga busca un equilibrio entre la precisión tecnológica y la tradición del arbitraje humano. “El sistema de dos impugnaciones representa un punto medio entre los llamados ‘árbitros robot’, que decidirían cada lanzamiento, y el margen de error natural propio del juego”, destacó la MLB en un comunicado. La decisión marca la primera vez en la historia de este deporte en que las sentencias sobre bolas y strikes dejarán de ser inapelables en partidos oficiales de campeonato.
