Nueva York. – Cientos de delegados de distintos países abandonaron la sala de la Asamblea General de la ONU en el momento en que hacía su entrada el primer ministro de Israel, en señal de protesta por la situación en Medio Oriente.
La acción se produjo de manera coordinada por varias delegaciones que rechazaron la participación del líder israelí en el marco del debate general anual de Naciones Unidas. El hecho generó un fuerte impacto mediático y dividió posturas entre quienes respaldaron el boicot y los que defendieron el derecho del jefe de Estado a presentar su discurso.
Este tipo de manifestaciones refleja la tensión diplomática que persiste en torno al conflicto en Gaza y Cisjordania, donde la comunidad internacional mantiene posiciones encontradas sobre las políticas israelíes y la respuesta a la crisis humanitaria en la región.
Hasta el momento, la Secretaría General de la ONU no ha ofrecido declaraciones oficiales sobre la protesta, pero analistas consideran que el episodio marcará un precedente en las discusiones de este año.