Durante su participación en la vigésima reunión Regional Americana de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el presidente Luis Abinader exhortó a construir una región donde el trabajo represente dignidad, justicia y prosperidad compartida, con el propósito de que el crecimiento económico se traduzca en más y mejores empleos, expansión de la clase media y reducción de la pobreza.
El mandatario aseguró que el verdadero desarrollo debe medirse en la dignidad, los derechos y la calidad de vida de sus trabajadores, no únicamente en el crecimiento económico. Recordó que, en la región, más de 300 millones de personas forman parte de la fuerza laboral, pero casi la mitad trabaja en condiciones de informalidad, sin acceso a seguridad social ni derechos garantizados.
En ese contexto, el presidente Abinader compartió los avances de República Dominicana al colocar el empleo en el centro de las políticas públicas, señalando que el país lidera el crecimiento económico en América Latina y el Caribe con tasas superiores al promedio regional, que según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), apenas alcanzará un 1.9 % este año.
Destacó la creación de más de 200,000 nuevos empleos formales tras la pandemia, el incremento del poder adquisitivo de los salarios reales y el hecho de que, por primera vez en décadas, el salario mínimo cubre en promedio el costo de la canasta básica en sectores clave.
Además, en el sector turístico, informó que el país recibió más de 11 millones de visitantes en 2024, generando 750,000 empleos directos y 870,000 indirectos. El presidente Abinader insistió en que los desafíos actuales como la transición tecnológica, cambio climático y las transformaciones demográficas demandan instituciones fuertes y un contrato social renovado basado en justicia, inclusión y sostenibilidad.