Detrás de la noticia de la sustracción de un celular en el Hospital Marcelino Velez, en Santo Domingo Oeste, se desarrolla una historia de fe y ciencia.
La joven de 24 años, Ana Cristina Upia Cuchel, víctima del robo, se encuentra luchando por salvar su brazo izquierdo después de ser atacada por dos perros pitbull mientras intentaba huir de un secuestrador en Santo Domingo Norte.
Según narró su madre, Ana Cristina Upia Cuchel, fue secuestrada por un hombre que la drogó y abusó de ella.
Indicó que en su intento por escapar, ingresó a una propiedad privada, donde la joven fue atacada por los dos perros pitbull, provocándoles graves heridas en el antebrazo izquierdo y otras partes del cuerpo.
Dos meses despúes y más de 10 cirugías, el equipo médico multidisiplinario del Hospital Marcelino Velez lucha por salvar la extremidad de Ana Cristina Upia Cuchel.
La joven madre no tiene recursos para pagar el tratamiento, pero su familia y el equipo médico se han dedicado a devolverle la esperanza.
El director del centro asistencial, Willy Victoria, destacó el trabajo en equipo multidisciplinario, que dada la gravedad de la herida, ponderó la necesidad de amputar el miembro, dada las complicaciones de infección.
Ella suplicó porque su brazo, y producto del esfuerzo médico, la jóven tiene una altísima probabilidad de conservar su miembro.
El galeno quien calificó como un milagro y un reto de la ciencia, explicó que el Hospital tendrá que asumir la totalidad de loa gastos médicos.
Ana Cristina también fue víctima de robo de su teléfono en el centro asistencial.
