Aunque su relación con el rapero Kanye West estuvo marcada por éxitos públicos y una extensa vida en común, Kim Kardashian admitió que mantener el vínculo fue cada vez más difícil ante la inestabilidad constante.
“No sabía qué me iba a pasar al despertar”, comentó para ejemplificar el ambiente de tensión que vivía en casa.
También apuntó a razones emocionales profundas para justificar por qué permaneció tanto tiempo: al presentarse el primer colapso mental de West, aseguró su instinto fue ofrecer apoyo.
“Quieres brindarle mucho apoyo y ayudarlo a resolverlo”, comentó. Sin embargo, con el tiempo constató que West no estaba dispuesto a hacer cambios que ella consideraba esenciales.
Kardashian reconoció que una de sus principales debilidades es recordar lo bueno de sus relaciones pasadas. Agregó que, a pesar de su naturaleza perdonadora, tras el divorcio no ha tenido más relaciones tan tóxicas como aquella.
Otro factor que marcó su decisión fue su rol como madre de sus cuatro hijos: North, Saint, Chicago y Psalm. Kardashian afirmó que en un punto, su salud mental empezó a verse afectada y eso limitó su capacidad para criar y estar presente para ellos. Por eso decidió retirarse primero por su propio bienestar y luego pensar en la estabilidad familiar.
El episodio de los Lamborghinis
Uno de los momentos más impactantes relatados fue cuando ella aseguraba que su esposo regalaba los autos de lujo que compartían, durante episodios de conducta impredecible. “Llegaba a casa y teníamos como cinco Lamborghinis, y si él salía en un episodio, ya no estaban”, contó Kardashian, quien afirmó que pensaba: “¿Dónde están todos nuestros coches? ¿Mi coche nuevo?”.
Antecedentes de salud mental de Kanye West
Kanye West hizo público su diagnóstico de trastorno bipolar en 2018, tras una hospitalización por una emergencia psiquiátrica ocurrida en noviembre de 2016 y la cancelación de su gira Saint Pablo.
Durante los años siguientes, diversas fuentes han señalado que el rapero experimentó episodios maníacos y depresivos atribuibles a su condición.
Kardashian relató en la entrevista que cuando West cruzaba esos episodios, hablaba en público sobre su madre (Kris Jenner) y sus hermanas, lo que generaba fricciones personales. Para ella, ese tipo de ataques incrementó la tensión y constituyó un punto de ruptura en la relación.
Co-parentalidad y contacto con los hijos
Tras su divorcio, Kim asumió la custodia principal y afirmó que sus hijos viven con ella a tiempo completo, pero aseguró que no ha impedido el contacto con West. Explicó que siempre que él lo solicita, ella facilita encuentros e incluso viajes internacionales para que él pueda verlos.
Sin embargo, añadió que “han pasado meses” sin que él se comunique con los niños. Kardashian sostuvo que no quiere que su casa sea un campo de batalla mediático, por lo que toma decisiones de protección cuando lo considera necesario. También desmintió acusaciones de que ella mantiene a West alejado de sus hijos: “Nunca lo he hecho”, dijo.
Vida personal y nuevos proyectos
En esta nueva etapa, Kardashian afirmó que no ha tenido citas tan dramáticas ni relaciones igualmente tóxicas luego de su separación. Comentó que con la edad ha aprendido a no tolerar comportamientos destructivos: “No tiene tiempo”, expresó sobre su poca paciencia ante ciertas conductas.
Además, reveló que su hija mayor, North, le ha sugerido que encuentre de nuevo el amor: “Necesitas tener novio ya… Te estás haciendo demasiado mayor”. A esto ella respondió con sorpresa, pero admitió que lo escucha.
En el ámbito profesional, Kim tiene varios proyectos próximos: el 23 de octubre se estrena la temporada 7 de The Kardashians en Hulu, y el 4 de noviembre debuta la nueva serie de drama legal All’s Fair, en la que estará involucrada junto a nombres como Naomi Watts y Glenn Close.
También, en un avance de la temporada, se revelan momentos oscuros como una llamada de investigadores y una impactante declaración: alguien intentó asesinarla.
Aunque la entrevista está cargada de revelaciones duras, Kardashian dejó claro que no considera su matrimonio un fracaso. Dijo que más de una década junto a West y la existencia de sus cuatro hijos son testimonios válidos de que aquello fue significativo.




