La Vega. – A diario, numerosos camiones son vistos extrayendo arena del río Camú, una práctica que está destruyendo su cauce y afectando gravemente el medio ambiente.
Este río, que en otros tiempos fue profundo y caudaloso, hoy luce reducido a un hilo de agua. Lo que antes albergaba vida, ahora muestra un paisaje desolador donde apenas se percibe el flujo del agua entre los bancos de arena removida.
El deterioro se extiende a todo lo largo del río, desde su nacimiento hasta su desembocadura, evidenciando una situación crítica que amenaza con hacer desaparecer uno de los principales afluentes del Cibao.
Moradores y defensores del medio ambiente han expresado su indignación ante la falta de acción de las autoridades. Afirman que el río Camú se encuentra en estado agónico, prácticamente al borde de la muerte, y que si no se detienen los abusos, pronto quedará solo el recuerdo de lo que fue una fuente vital para la región.
👉 El llamado es urgente a las autoridades del Ministerio de Medio Ambiente y a los gobiernos locales para que intervengan de inmediato, detengan la extracción ilegal de materiales y apliquen sanciones ejemplares contra quienes destruyen los recursos naturales.
Por Junior R. Henríquez.-
