La esperada secuela Zootopia 2 llega este 27 de noviembre a las salas con dirección y guion de Jared Bush y Byron Howard—, acompañada de un elenco de voces de lujo: Jason Bateman, Ginnifer Goodwin, Ke Huy Quan, Shakira y otros talentos.
Visualmente, la película despliega un mundo aún más ambicioso que el visto en la primera entrega: una ciudad-metrópolis animal crecientemente vasta, repleta de rincones y especies nuevas, con animaciones cuidadas al detalle y un desarrollo técnico que impresiona.
Narrativamente, la historia retoma a los protagonistas —la conejita policía Judy Hopps y el zorro Nick Wilde esta vez enfrentando una intriga mayor: el arribo de un misterioso reptil altera el equilibrio de la ciudad, lo que impulsa la investigación y obliga a los personajes a explorar territorios inéditos de la metrópolis.
El tono sigue siendo lúdico y humorístico: la secuela abunda en guiños culturales, homenajes al cartoon clásico e ingeniosos chistes visuales que enriquecen la experiencia, convirtiéndola en, posiblemente, una de las producciones animadas más cercanas a la sensibilidad de los mejores títulos de animación contemporánea.
Al mismo tiempo, Zootopia 2 conserva la sensibilidad de su predecesora: cada personaje —aunque sea secundario o episódico— recibe cuidado narrativo. La cinta combina acción, humor, aventura y un mensaje sobre diversidad e integración social, reafirmando su convicción en que todos los mundos posibles pueden convivir con respeto.
En definitiva: Zootopia 2 no solo revive el encanto del original —lo potencia. Logra ser una secuela equilibrada, entretenida y ambiciosa; ideal tanto para público joven como adulto, y perfecta para quienes buscan una película animada que divierta sin dejar de ofrecer sustancia.




