Redacción InfoENN – El Nuevo Norte
AHMEDABAD, INDIA.– El misterio en torno al accidente del vuelo AI-171 de Air India, que cobró la vida de 260 personas, ha dado un giro inquietante tras revelarse datos preliminares de la caja negra del avión. Según el informe de la Oficina India de Investigación de Accidentes Aéreos (AAIB), el flujo de combustible hacia ambos motores se interrumpió a pocos segundos del despegue, provocando una pérdida total de potencia y la caída de la aeronave sobre un área residencial cercana al aeropuerto.
El informe, publicado el pasado 12 de julio, detalla que el copiloto, visiblemente alarmado, preguntó al comandante:
“¿Por qué moviste los interruptores?”
A lo que el capitán respondió con serenidad:
“Yo no lo hice”.
Este breve intercambio, registrado en la grabadora de voz de cabina, ha despertado diversas hipótesis sobre lo ocurrido a bordo del avión. La investigación aún no descarta si se trató de un error humano, una falla técnica, o incluso un acto deliberado.
Según fuentes cercanas a la tripulación, el capitán del vuelo había perdido recientemente a su madre y presentaba signos de depresión severa. Algunos allegados señalan que, días antes del siniestro, el piloto habría dicho:
“Solo uno o dos vuelos más”.
La tragedia ocurrió apenas instantes después del despegue, cuando la aeronave comenzó a perder altura sin emitir señales de emergencia. El impacto contra los edificios dejó también múltiples víctimas en tierra y una zona de devastación.
Las autoridades aeronáuticas indias han solicitado una evaluación psiquiátrica retrospectiva del piloto, mientras se continúa analizando si el sistema de corte de combustible fue activado por error, por un desperfecto, o manualmente de forma voluntaria.
Este caso ha reabierto el debate sobre los controles psicológicos al personal aéreo y la necesidad de mejorar los sistemas de seguridad en cabina para evitar que un solo acto comprometa la vida de cientos de personas.
La investigación sigue en curso y se espera un informe final en los próximos meses.
