Estados Unidos.– Un operativo del FBI y la Fiscalía del Distrito Este de Nueva York destapó un amplio escándalo de apuestas ilegales y fraude deportivo que involucra a figuras de la NBA y a organizaciones criminales de la mafia estadounidense.
Entre los 31 arrestados se encuentran el entrenador de los Portland Trail Blazers, Chauncey Billups, el jugador de los Miami Heat, Terry Rozier, y el exjugador de los Cleveland Cavaliers, Damon Jones, quienes fueron detenidos la mañana del jueves 23 de octubre de 2025, según informaron las autoridades federales.
Billups, de 49 años, fue arrestado en su residencia de Portland horas después de que su equipo perdiera su partido inaugural ante los Minnesota Timberwolves. Rozier fue detenido en Orlando, donde los Heat enfrentaban a los Magic, mientras que Damon Jones fue capturado en Cleveland.
El director del FBI, Kash Patel, calificó las detenciones como “históricas”, al revelar que se trataba de una operación coordinada en 11 estados para desmantelar una red de fraude, manipulación de resultados y apuestas deportivas ilegales vinculada a La Cosa Nostra.
“Estamos hablando de decenas de millones de dólares en fraude”, declaró Patel en conferencia de prensa. “Esta operación criminal abarcó tanto la NBA como estructuras mafiosas activas en Nueva York y otros estados. Los arrestos de hoy son solo el comienzo de un caso que sigue en curso”, añadió.
El fiscal federal Joseph Nocella Jr., del Distrito Este de Nueva York, explicó que las acusaciones abarcan dos casos principales relacionados entre sí:
1. Una conspiración de apuestas deportivas internas, en la que se habría utilizado información confidencial sobre jugadores y equipos de la NBA para obtener ganancias millonarias.
2. Un esquema nacional de manipulación de juegos de póker ilegales, operado por exdeportistas y respaldado por las familias mafiosas Bonanno, Gambino y Genovese.
Según el expediente, los acusados utilizaban tecnología avanzada para hacer trampas en partidas clandestinas de alto nivel, defraudando a los participantes por sumas millonarias.
Las autoridades calificaron el caso como “uno de los escándalos de corrupción deportiva más audaces desde la legalización de las apuestas en línea en Estados Unidos”.
La NBA emitió un comunicado indicando que la liga “toma estos hechos con la máxima seriedad” y que colaborará plenamente con las autoridades federales para proteger la integridad del deporte.
Este escándalo podría tener consecuencias disciplinarias sin precedentes para los implicados y abre un debate sobre la relación entre las apuestas deportivas y la transparencia competitiva en el baloncesto profesional.
