Tailandia endureció desde este sábado sus restricciones sobre el consumo, la venta y la publicidad de bebidas alcohólicas, en virtud de una enmienda a la Ley de Control de Bebidas Alcohólicas que refuerza las sanciones e impone responsabilidades directas a los consumidores.
La normativa, publicada el 9 de septiembre en el diario oficial de Tailandia, Royal Gazette, y en vigor desde hoy, amplía la definición de "bebida alcohólica" a todo producto con un grado igual o superior al 0,5 % y prohíbe cualquier tipo de promoción comercial que incentive el consumo, incluidas las realizadas por celebridades, influenciadores o figuras públicas, según fuentes del Ministerio de Salud tailandés.
El texto mantiene la histórica prohibición de venta de alcohol en la mayoría de comercios y supermercados entre las 14:00 y las 17:00 horas, vigente desde 1972, pero introduce un cambio clave: a partir de ahora, las multas no solo recaerán sobre los establecimientos que infrinjan la norma, sino también sobre los propios consumidores.
Lugares prohibidos
De acuerdo con la legislación modificada, cualquier persona que sea servida o consuma alcohol durante las horas o en los lugares prohibidos podrá enfrentarse a sanciones de hasta 10,000 baht (unos 260 euros).
Las autoridades señalaron que quedan exentos los locales con licencia, los hoteles y los establecimientos certificados en zonas turísticas, así como los bares y restaurantes de aeropuertos internacionales.
- La nueva ley también endurece las limitaciones a la publicidad, que solo podrá incluir información puramente factual, sin elementos visuales o textuales que inciten a beber.
El Gobierno tailandés defiende que los cambios buscan proteger la salud pública y reducir el impacto social del consumo de alcohol, especialmente entre los jóvenes.





