La Casa Blanca expresó su descontento con la decisión del comité del Premio Nobel de la Paz, que este año otorgó el galardón a la líder opositora venezolana María Corina Machado, dejando fuera al presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Funcionarios del Gobierno estadounidense sostienen que la elección del comité priorizó criterios políticos por encima de los logros en materia de paz.
El descontento surge tras la mediación de Trump en un acuerdo entre Israel y el movimiento palestino Hamás que permitió un alto el fuego en Gaza, firmado apenas un día antes del anuncio del premio.
“Sea lo que sea que hagan, está bien. Sé esto: no lo hice por eso, lo hice porque he salvado muchas vidas”, afirmó el mandatario republicano.
El director de comunicación de la Casa Blanca, Steven Cheung, respaldó la postura presidencial en redes sociales: “El comité del Nobel probó que pone la política por encima de la paz. El presidente Trump seguirá alcanzando acuerdos, poniendo fin a guerras y salvando vidas”.
Sin embargo, expertos del Nobel habían advertido días antes del anuncio que las políticas de “América Primero” del mandatario no se alinean con los ideales de Alfred Nobel, establecidos en su testamento en 1895, lo que reducía significativamente sus posibilidades de ser galardonado.